2 de junio de 2025
Cristina Kirchner y Axel Kicillof: en el peronismo bonaerense, 20 años no es nada

La presidenta del PJ y el gobernador se preparan para la batalla final. Asediados por la Justicia y el Gobierno, respectivamente, el partido se encamina a un cisma que se repite cada dos décadas
La historia no se repite, pero rima. En 2025, Axel Kicillof reformula esa tradición de ruptura y renovación y se prepara para doblegar, un liderazgo que viene ajado por una acumulación de fracasos, ajenos y propios. Están ahí las experiencias fallidas con Daniel Scioli, Alberto Fernández y Sergio Massa. Al gobernador lo empujan y se deja empujar en esa aventura por una coalición de intendentes y punteros fastidiados con CFK, pero más con La Cámpora. Es una guerra sin cuartel por el poder, pero también por el rencor.
“Estas elecciones legislativas sabemos que son difíciles: hace 20 años que el peronismo no gana las elecciones intermedias”, aguijoneó Kicillof desde el escenario. A un costado estaba Jorge Ferraresi, de Avellaneda, y también Fernando Espinoza, de La Matanza. Son dos barones del Conurbano que saben tanto de lealtad como de traición. ¿O no le prometió Espinoza a CFK que nunca la iba a enfrentar si era candidata por la Tercera Sección Electoral? Con todos estos antecedentes, el peronismo se enfrenta a la hora de la verdad, en un escenario que se parece bastante a lo que pasó en las elecciones de la Capital Federal. Hay al menos diez candidatos que pueden “morderle” cachitos del caudal electoral opositor a Javier Milei. Intendentes como Julio Zamora, de Tigre; Fernando Gray, de Esteban Echeverría, los hermanos Passaglia, de San Nicolás; Guillermo Moreno, Facundo Manes, Ricardo Alfonsín, los libertarios blue de Carlos Kikuchi y Fernando Burlando, anticiparon su voluntad de competir el 7 de septiembre.Cristina Kirchner supo definir al poder como la facultad de “hacer que las cosas sucedan”. Hace ya tiempo que no pasa. Ninguno de los gobernadores peronistas estuvo presente en su asunción como Presidenta del PJ Nacional y asistieron pocos intendentes y menos sindicalistas. El partido se convirtió en una caja de resonancia de los propios y recipiente de las quejas de los otros. La ex vicepresidenta, igual, busca el diálogo con todos los que quieren verla.
Cristina Kirchner ha dicho que estaba dispuesta a ser candidata por la Tercera Sección Electoral. Ganar en La Matanza, Lomas de Zamora, Quilmes, Lanús y Avellaneda y convertirse en una referencia opositora a Milei con proyección nacional. Son 19 municipios y casi 5 millones de votos. Es allí el epicentro del desafío más complicado que le plantó Kicillof. “No suele hablar por hablar, pero la prioridad es la unidad”, advierten en su entorno.
No es la interna peronista, igual, lo que más le preocupa. Sabe que la Corte Suprema puede en cualquier momento firmar un escueto artículo 280 que rechace el último recurso contra la condena a seis años de prisión por la Causa Vialidad. La pena accesoria es inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos, nacionales y provinciales. Es una decisión que puede cambiar el escenario del peronismo bonaerense y nacional. Porque 20 años no es nada. O lo es todo. Hoy se empezará a develar la verdad de lo que viene.